Para los que tratamos estos animales es muy importante saber cuando estamos ante un macho o una hembra pues sus patologías son diferentes muchas veces. Obviamente la diferenciación sexual es más evidente con la madurez sexual, a partir del año de edad.
Sexaje de iguanas
En cuanto a los caracteres sexuales secundarios o externos tenemos:
En la primera imagen, un macho de iguana con sus características típicas, coloración más anaranjada, escamas dorsales más largas, cabeza y cuello más robustos, escama timpánica más prominente… Difiriendo de él, en la imagen de la derecha, una iguana hembra, color mas verdoso o gris, según su estado sexual o mimético, menos robusta, escamas dorsales más estilizadas…
Uno de los caracteres sexuales más diferenciadores de las iguanas es la presencia o no de los llamados poros femorales, estructuras alineadas situadas en la piel de la cara interna de las piernas, estructuras productoras de hormonas sexuales o feromonas, glándulas mucho más desarrolladas en los machos adultos. Pero muchas veces ( como en la foto de abajo) no están muy claras esas glándulas y en caso de duda tenemos que recurrir a la búsqueda de las gónadas y órganos genitales. Ello lo haremos con la observación interna mediante endoscopia ( testículos u ovarios) o mediante la exteriorización de uno o los dos hemipenes que presentan todos los saurios o lagartos.