El desprendimiento de cola en los geckos es un fenómeno natural y normal que se conoce como autotomía de la cola. Los geckos tienen la capacidad de desprender su cola como una forma de defensa o para escapar de un depredador. Esta adaptación les permite distraer al depredador mientras la cola se retuerce y se mueve, permitiendo que el gecko escape.
Cuando un gecko suelta su cola, esta se desprenderá voluntariamente en una zona de ruptura predefinida llamada «plano de autotomía». Una vez que la cola se desprende, el gecko puede regenerarla en unos treinta días, aunque la cola regenerada no será exactamente igual a la original en términos de forma y color.
Es importante destacar que el desprendimiento de la cola en los geckos no es una enfermedad ni una condición preocupante por sí misma, siempre y cuando ocurra de manera natural. Sin embargo, hay algunas situaciones en las que el desprendimiento de la cola puede indicar un problema subyacente, como una lesión, enfermedad o estrés extremo.
Si notas que tu gecko ha perdido su cola, es recomendable observar si hay alguna señal de lesión o sangrado en el área donde se produjo el desprendimiento. Si la pérdida de la cola está acompañada de otros síntomas, como falta de apetito, letargo, cambios en la piel o problemas de locomoción, es aconsejable llevar al gecko a un veterinario especializado en reptiles para una evaluación completa.
En general, si un gecko pierde su cola de forma natural, no hay necesidad de preocuparse, ya que el gecko debería poder regenerar una nueva cola en un período de tiempo. Es importante proporcionarle al gecko un entorno adecuado, una dieta equilibrada y evitar el estrés para promover una buena salud en general y facilitar el proceso de regeneración de la cola.
Si tu gecko vive con otros de su especie, es mejor que lo apartes durante este proceso a otro terrario limpio para que no coja ninguna infección.
Y por último «nunca cojas a tu gecko por la cola», cógelo por la zona del vientre y patas.