Cuando hoy por hoy el COVID-19 ha infectado a más de 1.250.000 personas (confirmadas) en todo el mundo y se han superado las 70.000 muertes, aparecen noticias sobre el papel del gato en la enfermedad que pueden generar dudas y temores más que aportar información útil.
Se han documentado unos cuantos casos de gatos y otros felinos como un tigre del zoológico de Nueva York que eran positivos al virus. Todos estos casos tenían propietarios o cuidadores que eran positivos al virus y que muy probablemente han sido la causa de contagio de estos animales.
Además, un estudio preliminar (no ha pasado por el proceso de revisión por expertos antes de ser publicado), mostraba como en condiciones experimentales, los gatos podían contagiarse con COVID-19 y transmitirlo a otros gatos. Este estudio inoculaba una cantidad de virus en los gatos que difícilmente ocurriría en la vida real. Aún así, solo un gato sano se contagió, lo que parece indicar que la transmisión entre gatos es mucho menos eficiente que entre personas.
Por último, hasta hoy, otro estudio realizado en Wuhan, China mostraba que alrededor de un 15% de los gatos analizados habían estado en contacto con el Coronavirus. El estudio no analizaba si estos gatos habían tenido síntomas o no y aquellos gatos cuyos propietarios eran positivos tuvieron los niveles más altos de anticuerpos frente al virus.
Con todo, los datos parecen indicar dos cosas:
- El gato, y posiblemente otros felinos, pueden verse afectados muy ocasionalmente por el virus, especialmente siendo contagiado por propietarios o cuidadores que tienen la enfermedad. Estos gatos no muestran síntomas o son muy leves y su capacidad de infectar a otros gatos parece muy limitada.
- Comparar el número de gatos afectados con la tragedia que supone en personas, ofrece la dimensión real, anecdótica, del problema en los gatos. COVID-19 es una enfermedad de transmisión entre personas, que afecta a personas y es donde deben centrarse los esfuerzos por contener la enfermedad.
¿Qué pasa con los gatos?
Nada. En momentos donde muchas personas están aisladas de sus familiares y con la única compañía directa de sus mascotas, pueden seguir disfrutando de esta compañía y seguir las recomendaciones que se han venido haciendo desde el inicio de la pandemia.
- Aquellas personas con COVID-19 que tengan animales de compañía, deben evitar o reducir el contacto con sus animales. Se recomienda que otro miembro de la familia se ocupe del cuidado de estos animales. Si esto no es posible, hay que lavarse bien las manos antes y después de haberlos tocados y disminuir al mínimo imprescindible el contacto con estos animales.
- En aquellos gatos con acceso al exterior, hay que evitar que puedan salir. En los perros, los paseos deben ser, tal como indica la normativa, lo más cortos posibles y manteniendo la distancia recomendada con otras personas.
- Si estos animales necesitan ir al veterinario, llame con antelación para informar que han estado en contacto con una persona con COVID-19 y que su veterinario pueda valorar si es necesario ver al animal, y en ese caso tomar las medidas adecuadas.
- No se recomienda en estos momentos hacer análisis a perros o gatos
asintomáticos.
La situación de la pandemia cambia día a día y los veterinarios seguiremos atentos a las informaciones que aparezcan, las valoraremos de forma rigurosa para adaptar nuestros protocolos y recomendaciones si fuera necesario. Hoy por hoy, no hay evidencia de que el gato pueda transmitir la enfermedad a personas.
Fuente: AVEPA, la Asociación de Veterinarios Españoles Especialistas en Pequeños Animales, que reúne a mas de 5.400 veterinarios españoles dedicados a la clínica de animales de compañía, cuenta con 56 años de experiencia en la formación científica del sector veterinario de animales de compañía y en la elaboración de informes yestudios sobre la sanidad de nuestras mascotas. Siendo su misión la de Ofrecer a los veterinarios y sus colaboradores la mejor formación científica y humana, persiguiendo la excelencia profesional, y contribuir de este modo a la mejora del bienestar animal.