El caballo: un gran compañero

Introducción

Desde hace más de cuatro mil años lleva acompañando al hombre. Se cree que los primeros caballos fueron domesticados por pueblos nómadas. Se han encontrado embocaduras y piezas de arneses, que demuestran que el caballo ya estaba domesticado en esta época en la Edad del Bronce. Durante la Edad Media tuvo una gran importancia ya que fue utilizado tanto para labrar los campos, como para el desplazamiento de personas y enseres, así como para alimento.

A lo largo de la historia han existido caballos famosos. Estos son algunos de ellos:

• Bucéfalo caballo del conquistador Alejandro Magno
• Babieca, la yegua del Cid Campeador, líder militar durante la Reconquista Española
• Marengo, del Emperador Napoleón Bonaparte
• Palomo de Simón Bolívar político, estadista y militar

Actualmente en libertad solo quedan un reducido grupo que o bien descienden de caballos que fueron liberados por el hombre de nuevo en la naturaleza llamados cimarrones. En España se pueden ver estos ejemplares en la localidad de Salgüero de Juarros (Burgos)

Cuidados básicos del caballo

Un caballo necesita una limpieza diaria a fondo de su cuadra. Por supuesto también una buena alimentación, cuidados veterinarios (tales como vacunación, desparasitaciones, revisión de dientes) e higiene. Para ello hay webs especializadas como paracaballo.com que nos ofrecen comparativas de productos, accesorios para caballos y valoraciones reales de otros usuarios.

Vamos a ver cuales son las atenciones que necesita este maravilloso animal:

• Habitáculo

La cuadra necesita ser amplia, para que el caballo se pueda acostar a dormir sobre un lecho seco de paja que tiene que tener como mínimo unos 20 cms.  Esta opción es la más económica y resulta cálida y confortable, pero en ocasiones puede contener esporas de hongos y el caballo puede llegar a comérsela.

Estar bien ventilada es otro aspecto fundamental y se debe retirar el estiércol dos veces al día. Es muy importante para que el caballo no coja ninguna infección. Constará de un bebedero y un comedero que habrá que desinfectar una vez a la semana.

• Espacio al aire libre

El caballo es un animal que requiere espacios abiertos para ejercitarse por lo que necesita salir de la cuadra a un lugar delimitado pero amplio para que pueda pastar y correr. Al ser un animal sociable, que gusta de vivir en manadas es importante que se relacione con otros caballos, porque si no puede sumirse en una terrible tristeza y desembocar en comportamientos anómalos.

• Alimentación

La alimentación depende del tamaño, raza, edad, actividad física, condición de los dientes y climatología. El caballo es un animal herbívoro por lo que come fundamentalmente heno y alfalfa. Esta comida también debe ser suplementada con un pienso adaptado a sus necesidades. Es importante que la ración de alimento se distribuya unas tres veces al día. También es primordial que disponga de agua todo el día ya que beben entre 25 y  55 litros de agua. No debe de faltarle nunca. En la dieta debe incluirse una piedra de sal ya que el sodio es vital para el sistema nervioso central y el transporte de glucosa a través de las membranas celulares. Le ayudará a recuperarse después de cualquier actividad física. Los premios que más agradecen son las zanahorias y las manzanas.

• Aseo

Lo normal es que realice una hora al día de actividad como mínimo. Dependiendo del ejercicio físico que realice estará recomendado el baño, con champús y productos especializados. El cepillado se debe realizar con un cepillo especial para caballos y habrá que practicarlo cada día, lo mejor es antes de salir y después de entrar a la cuadra. Esta actividad estrecha la relación con el dueño. Es importante también limpiar los cascos una vez al día con un limpiacascos porque puede haber pequeñas piedras que se hayan incrustrado, así como suciedad que pueden dañar la salud del animal. De vez en cuando necesitará los cuidados de un herrero para que le realice una «manicura profesional» recortando los cascos y limando las pezuñas. Esto se suele hacer cada seis semanas más o menos.

• Salud

El veterinario establecerá el calendario de desparasitaciones y vacunaciones. Asimismo es de vital importancia revisar la boca por un veterinario dentista especializado por lo menos una vez al año. Los dientes de los caballos crecen durante toda su vida, debido a que la mayor parte del tiempo están estabulados no desgastan como lo haría un caballo en libertad. Los dientes tienden a desarrollar puntas afiladas que resultan muy dolorosas al clavarse en la boca por lo que el veterinario tendrá que limarlas para que haya una buena salud e higiene dental y no se produzcan heridas e infecciones.

Autora: Antonia Villalba