No es muy común que los gatos disfruten de las aceitunas, ya que su dieta principal se basa en proteínas de origen animal. Los gatos son carnívoros estrictos, lo que significa que su dieta se basa en consumir carne para satisfacer sus necesidades nutricionales. Pero hay algunos gatos que se sienten atraídos por las aceitunas, en el siguiente artículo te contamos porque ocurre.
Gatos y aceitunas
Es posible que algunos gatos puedan mostrar interés en las aceitunas debido a su textura o sabor, pero esto no es extensible a todos los felinos. Pueden contener altas cantidades de sodio, lo que podría ser perjudicial para la salud de los gatos si se consumen en grandes cantidades. Así que como ocurre con todo lo bueno, un poquito no es malo, pero en grandes cantidades sí.
Las aceitunas contienen ácido oleico lo que originan su fuerte olor. Además, contienen oleuropeína, un polifenol que confiere a la aceituna su sabor amargo y por ende al aceite de oliva. Este componente estimula a los gatos porque afecta a su sistema nervioso central y les relaja, como ocurre con la hierba gatera.
Beneficios de las olivas para los gatos
Las aceitunas tienen un gran aporte energético, así como vitaminas A, E, C, calcio, fósforo, hierro, magnesio y zinc. Son muy digestivas y ayudan a tener un buen transito intestinal. Se puede dar de vez en cuando como golosina.
Cómo dar aceitunas a un gato
Como hemos dicho anteriormente su consumo por parte de nuestro gato tiene que ser algo esporádico. Lo mejor es ofrecérselas deshuesadas, ya sean verdes o negras, para que nuestro felino no se atragante. Por otro lado, si nuestro gato se traga un hueso de aceituna, lo más probable es que las elimine al evacuar.
Contraindicaciones
No debemos dar aceitunas a los gatos que no estén tratadas, es decir directamente del olivo, tienen que estar aliñadas. Las aceitunas no son un alimento apropiado para gatos con enfermedad renal o con problemas cardiacos, a los que se recomiendan dietas bajas en sodio.
Autora: Antonia Villalba
