La Leucemia Felina

Leucemia felina

 

Las enfermedades víricas son la principal causa de morbilidad y mortalidad atraumática de los gatos domésticos.
Los programas de vacunación son esenciales para el manejo de la mayoría de las enfermedades víricas felinas.

El contagio de las enfermedades víricas se realiza tras la exposición o el contacto de un animal sano con un animal enfermo o con el virus que ha depositado en el ambiente el animal infectado; las rutas de transmisión habitual son las siguientes:

  • – Ingestión de alimento o agua contaminados.
  • – Inhalación o contacto de las mucosas con fluidos corporales o aerosoles (gotas de pequeño tamaño originadas tras el estornudo) infectados.
  • – Exposición intrauterina a partir de madres infectadas.
  • – Inoculación del virus por mordedura, arañazo, insectos vectores…

Pero algo que debemos tener muy presente es que la simple exposición al virus no asegura una infección; existen múltiples factores de los que depende que el contacto del virus con un animal sano desencadene una infección; las posibilidades son las siguientes:

 

Tampoco debemos olvidar que las posibilidades de infección aumentan en las comunidades de gatos sin control o en grupos supuestamente controlados pero con escaso o inadecuado manejo; la infección en estos casos es debida a:

  • – La cohabitación de un gran número de animales (mayor riesgo).
  • – Hacinamiento
  • – Mal manejo: poca ventilación, escasa higiene, subnutrición…
  • – No existencia de lugares de aislamiento de enfermos…
  • – Mal manejo de las pautas vacunales.
  • – Etc…

Y en contrapartida, la forma de manejar y minimizar los riesgos en estos casos pasa por:

  • – Aislar los gatos infecciosos o potencialmente infecciosos de los sanos o susceptibles.
  • – Identificar y retirar los gatos con infección persistente de la población.
  • – Eliminar o reducir la carga vírica ambiental.
  • – Minimizar el estrés de los animales.
  • – Establecer pautas adecuadas de vacunación.
  • – Mantener poblaciones inmunes contra virosis específicas.

Leucemia felina

LEUCEMIA FELINA

El virus de la Leucemia Felina (ViLeF) se identificó por primera vez en el año 1964 como posible causante de linfosarcomas en un grupo de gatos.
Se supone que el origen de este virus data de más de un millón de años atrás cuando un retrovirus de rata infectó a un ancestro del gato actual, transformándose en un virus felino.
El ViLeF es un Oncovirus que se asocia a enfermedades neoplásicas y no neoplásicas.
Existen tres subgrupos de ViLeF:

– A: se encuentra en más del 90% de los gatos leucemia positivos; se transmite con facilidad de gato a gato y produce una rápida viremia tras la infección.
– B: acompaña al A (coinfección) en un 50% de los casos; no se transmite con facilidad y produce una viremia de forma lenta.
– C: apenas un 1% portan este subgrupo que aparece en coinfección con A; produce una viremia persistente en los neonatos.

EPIZOOTIOLOGÍA

El ViLeF infecta a los gatos domésticos de todo el mundo, pudiendo infectar de manera esporádica a otros felinos no domésticos.
Los machos son más sensibles que las hembras y existe una mayor incidencia entre el primer y el sexto año de edad.
Los gatos con viremia persistente excretan grandes cantidades de virus por la saliva y también por orina, lágrimas y leche.
La transmisión gato a gato se hace por contacto directo con alguna de estas secreciones durante acicalamientos, peleas, compartir alimentos, contacto con heces…

PATOGENIA

Cada vez más gatos son resistentes al virus de la leucemia ya que los gatos cada vez son más inmunocompetentes como especie; en los animales adultos la infección puede producir una viremia persistente o una recuperación aparente… Es muy difícil establecer una clasificación, un agrupamiento, un patrón para la infectividad del virus de la leucemia en las distintas edades y circunstancias de los distintos animales.
Muchos animales poseen el virus y nunca presentan la enfermedad, pero tras la entrada del virus en el animal podemos decir que se dan los siguientes pasos:

1. Replicación (multiplicación) del virus:

  • . en tonsilas y ganglios faríngeos cuando la exposición es oronasal.
  • . en ganglios regionales cercanos cuando la inoculación es por mordedura.

2. Infección de un pequeño número de linfocitos y macrófagos que serán los que diseminan la enfermedad por todo el organismo.
3. Replicación del virus en bazo, tejidos linfoides asociados al intestino, ganglios linfáticos, células epiteliales intestinales y células precursoras de la médula ósea.
4. Liberación de neutrófilos y plaquetas infectados desde la médula ósea hacia todo el torrente circulatorio.
5. Infección de tejidos epiteliales y glandulares, incluidos los tejidos salivales y la vejiga de la orina (posterior excreción de virus por saliva y orina).

Una correcta respuesta inmune detiene la progresión de la infección en el paso 2 ó 3 y obliga al virus a entrar en latencia.

Leucemia felina

PRESENTACIÓN CLÍNICA

En la mayoría de los gatos la enfermedad aparece tras meses o incluso años tras la infección; en el caso de los gatitos jóvenes, la enfermedad aparece rápidamente.
En la Leucemia felina, las enfermedades inducidas por el virus pueden clasificarse en neoplásicas y no neoplásicas, siendo las no neoplásicas generalmente resultado de la inmunosupresión producida por la enfermedad.

PROFILAXIS Y CONTROL

El mejor método de control es procurar que no entren en contacto gatos infectados y gatos sanos; la vacunación es importante siempre y cuando se realice una correcta prevención en la interacción gatos sanos – gatos infectados.
También es importante tener muy presente que previamente a la vacunación debería realizarse un testeo antigénico de la enfermedad, ya que es posible que en muchos casos se vacunen animales infectados.
Posteriormente al testeo se debe seguir a “rajatabla” la pauta vacunal recomendada por el veterinario.

DIAGNÓSTICO

Las infecciones por virus de Leucemia se detectan con análisis de laboratorio específicos para la enfermedad.

TRATAMIENTO

No existen tratamientos con agentes antivirales seguros y eficaces contra el virus de la leucemia felina, por ello el tratamiento se ha basado en dos métodos primarios de terapia antiretroviral:

  • – Fármacos que intentan controlar la replicación del virus: inhibidores de la transcriptasa inversa.
  • – Drogas inmunomoduladoras para potenciar la respuesta inmune.

Por otra parte el tratamiento también se encamina hacia manejar las enfermedades secundarias y oportunistas que desgraciadamente suelen acompañar a la acción directa del virus de la Leucemia felina.

 

Autor: Carlos Rodríguez                           Web: Clínica Veterinaria Mascoteros

Visitas: 0

Compártelo

infoespecies