¿Quién no ha tenido gusanos de seda cuando era pequeño? Ver a estos pequeñajos es una maravilla de actividad educativa, para que los niños aprendan sobre el ciclo de vida de los insectos.
Los niños pueden observar y aprender sobre el crecimiento de los gusanos de seda (Bombyx mori), su metamorfosis en mariposas, cómo producen seda y su puesta de huevos. También es una responsabilidad para ellos, ya que se les enseña a cuidar de estos pequeños animalitos al tener que alimentarlos con morera todos los días.
Como toda mascota es importante mantener a los gusanos lepidópteros en un ambiente limpio, retirar las hojas que se queden secas o en mal estado. Un truco es poner una servilleta de papel en el fondo de la caja y retirarlo cada dos o tres días, Pueden permanecer perfectamente en una caja de zapatos. Se les hace unos orificios en la parte superior con un lápiz para que el recinto pueda respirar. Prefieren estar con poca luz y a una temperatura constante, por lo que es recomendable no tener destapada la caja mucho tiempo.
El gusano de seda pasa por cuatro fases en su vida: huevo, larva, crisálida y mariposa.
- Huevo: salen de un pequeño huevo
- Gusano: comen durante alrededor de seis semanas hojas de morera y mudan su piel a medida que crecen
- Crisálida: tejen su capullo y finalizan así su etapa adulta
- Mariposa: en dos o tres semanas saldrá una mariposa del capullo.

Si quieres tener más gusanos de seda en años sucesivos debes dejar que las mariposas se apareen y realicen la puesta. La hembra es de mayor tamaño que el macho. La cópula dura unas horas. Posteriormente habrá una puesta de unos doscientos o trescientos huevos. Deberás guardarlos hasta el año que viene en un lugar seco y seguro, hasta la siguiente primavera.

Se debe enseñar a los niños a tratar a los gusanos de seda con cuidado y respeto, y evitar manipularlos en exceso.
Autora: Antonia Villalba