Hay multitud de ocasiones en las cuales tenemos que mezclar el pienso para perros con «algo» que le dé más sabor para que sea más palatable y nuestro peludo coma. Ya sea porque hacer calor, porque ha pasado por alguna operación o porque es mayor y no come todo lo que debiera, no podemos dejar que no tome bocado, porque iría en detrimento de su salud. En este artículo te vamos a dar algunas ideas para que tu mejor amigo deje el plato totalmente limpio.
Opciones para mezclar el pienso para perros
Es importante tener en cuenta las necesidades dietéticas específicas de tu perro, su edad, tamaño, nivel de actividad y posibles restricciones médicas. Sobre todo si toma alguna alimentación específica veterinaria será necesario que consultes con su médico para asegurarte que con la mezcla no rompes las propiedades balanceadas de su alimento. Pero si tu peludo es simplemente un poco caprichoso a la hora de comer, aquí tienes una serie de ideas para que disfrute de su comida.
Comida húmeda para perros
La comida húmeda es la forma más fácil para realzar de forma sabrosa el pienso. Te aconsejamos que midas bien la ración de alimentación seca porque si tu peludo no se la come entera, tendrás que desecharla. La comida húmeda se queda reseca pegada a las bolitas y luego ya no las quieren. Es recomendable elegir una buena marca, que en su fabricación utilice ingredientes naturales de alta calidad, y que no incluya saborizantes, ni colorantes artificiales, ni subproductos animales. Con un par de cucharadas para mejorar el sabor de la alimentación seca suele ser suficiente. Puedes encontrar comida húmeda en varias presentaciones:
- Lata: las hay grandes y pequeñas. Si no la utilizas toda, recubre lo que quede de la lata con agua hasta que la comida quede cubierta. Así se conservará manteniendo toda la humedad.
- Tarrina: no suelen ser grandes para que sean de una sola toma. Si te sobra, cámbiala de envase y recúbrela con agua, para que no se seque.
- Sobres: suelen ser en gelatina y están destinados a perros de raza pequeña. Son ideales para llevar de viaje. Si te sobra puedes guardarlo con una pinza.
Proteínas cocidas
Agregar carne magra cocida a la dieta de tu perro puede aumentar su ingesta de proteínas. Cocina las carnes (pollo, pavo, vaca, o pescado) sin sazonar ni condimentar, y asegúrate de retirar cualquier hueso o espina antes de dárselos a tu perro. La carne cocida también es útil para mezclar con suplementos vitamínicos o medicamentos recetados por el veterinario. Aquí puedes ver algunas recetas para perros que puedes usar para mezclar con el pienso. Otra estupenda proteína que puedes utilizar es el huevo, si lo cueces y haces huevos duros, puedes pelarlo, trocearlo y mezclarlo con la comida seca.
Arroz o pasta cocida
El arroz integral o la pasta cocida son fuentes de carbohidratos que pueden ayudar a proporcionar energía a tu perro. Son especialmente útiles cuando tu perro necesita un alimento de digestión suave, por ejemplo durante un episodio de problemas gastrointestinales leves. Si tu peludín tiene diarrea deja que el arroz embeba el agua donde has hecho la cocción.
Aceites saludables
Unas gotas de aceite de pescado puede ser un ingrediente estrella para que tu peludo se coma el pienso. Puedes utilizar aceite especial de salmón o de sardina para perros, les encanta. Además de ser beneficioso para la salud de la piel y el pelaje de tu perro, ya que contienen ácidos grasos esenciales (Omega 3, 6 y 9).
Recomendaciones
Si tu perro se come bien la comida seca, no se la mezcles, o hazlo como algo especial porque si no luego no se la comerá, a no ser que le añadas ese «extra tan rico». Y recuerda, siempre debes introducir nuevos alimentos gradualmente y observar cómo reacciona tu perro. Es recomendable consultar con el veterinario antes de realizar cambios significativos en la dieta de tu perro, especialmente si tiene condiciones de salud preexistentes.
Autora: Antonia Villalba
