Tres clubes caninos se comprometen a tutelar al Griffon Khortal, al Braco Húngaro y al Pachón Navarro para fomentar su crecimiento

Tres clubes de la Real Sociedad Canina de España (RSCE) se han comprometido a tutelar las razas Griffon Khortals, el Braco Húngaro y el Pachón Navarro para fomentar el desarrollo, la conservación y la mejora de estos grupos étnicos, que actualmente no cuentan con su propio club,  así como su participación en algunas actividades y competiciones a las que ahora tienen difícil acceso o presencia muy escasa. 

Así lo han acordado durante una reunión de la Comisión de Perros de Muestra en la RSCE, en la que se apoyó esta iniciativa para promover la tutela de estas tres razas por parte de clubes que no están directamente relacionados con ellas pero cuentan con una avalada trayectoria de gestión. El objetivo es que puedan crecer, expandirse, colaborar con la RSCE y llegar a tener su propio club, a corto o medio plazo. 

Tras las consultas y aprobaciones preceptivas entre los presidentes de estos clubes y sus juntas directivas, se ha acordado que el Club español del Epagneul Bretón, el Club español del Braco Alemán y el Club español del Deutsch Drahthaar serán los que asuman la tutela del Griffon Khortals, del Braco Húngaro y del Pachón Navarro, respectivamente.

La RSCE confía en que esta iniciativa sirva para que otros clubes se comprometan con otras razas de perros con las que tengan algún grado de afinidad y que estén en esa misma situación de orfandad en cuanto a club. Esta es otra de las muchas iniciativas para fomentar el desarrollo, evolución, conservación, fomento y la mejora de las razas. 

Razas tuteladas 

El Pachón navarro es un perro de muestra para caza menor para pelo y pluma adaptado a cualquier tipo de terreno. Su caza es al trote, ordenada y cercana al cazador, con el que forma un tándem de manera espontánea, desarrollando la llamada «caza inteligente».

El Griffon Khortals, es esencialmente un perro de muestra polivalente, manso, altivo, excelente cazador, mientras que el Braco Húngaro, por su parte, es un utilitario cazador tanto en el campo como en el bosque y es capaz de sobrevivir a inclemencias climáticas extremas. 

Según el presidente de la RSCE, José Miguel Doval, “además de ser un patrimonio natural, las razas caninas constituyen un legado cultural, antropológico e histórico que debemos preservar.  Por esta razón, contribuimos a su protección y desarrollo a través de iniciativas como ésta y facilitando la información, asesoramiento y respaldo a los criadores éticos y responsables”. 

 

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