La Noche de San Juan, celebrada el 23 de junio, es una fiesta muy popular en muchas regiones, caracterizada por hogueras, fuegos artificiales y petardos. Aunque es una noche mágica para las personas, puede ser una experiencia traumática para las mascotas, especialmente perros y gatos, por su oído sensible y la imprevisibilidad de los ruidos.
Aquí tienes una guía clara y práctica para proteger a tus mascotas en la Noche de San Juan:
🧡 ANTES DE LA NOCHE
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Ejercicio previo: Saca a tu perro a dar un largo paseo antes del anochecer. Así estará más relajado y con menos energía acumulada.
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Crea un refugio seguro: Acondiciona una habitación donde se sienta seguro. Puedes usar su cama, mantas, juguetes y algo que huela a ti.
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Cierra puertas y ventanas: Reduce el ruido exterior y evita que huya si se asusta.
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Identificación actualizada: Asegúrate de que lleve microchip y una placa con tus datos. El miedo puede hacer que huya desorientado.
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Consulta con el veterinario: Si tu mascota sufre de ansiedad severa, el profesional puede recomendarte feromonas, suplementos o medicación puntual.
💥 DURANTE LA NOCHE
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No lo dejes solo: Tu presencia lo tranquiliza. Si no puedes quedarte, déjalo con alguien de confianza.
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Música relajante o ruido blanco: Enmascara los ruidos externos. Puedes usar la TV o playlists calmantes para mascotas.
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No refuerces el miedo: Evita sobreproteger si tiene miedo. Mantén la calma y actúa con normalidad para no aumentar su ansiedad.
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No lo castigues: Si ladra o se esconde, es una reacción natural al estrés. La paciencia es clave.
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Evita el exterior: No lo saques mientras haya petardos o fuegos artificiales. Incluso si está acostumbrado, puede alterarse inesperadamente.
🐾 DESPUÉS DE LA NOCHE
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Revisión de heridas o quemaduras: En caso de haber estado expuesto accidentalmente al fuego o petardos.
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Refuerzo positivo: Si lo hizo bien, felicítalo con caricias o premios. Esto lo ayudará a enfrentar mejor futuras situaciones.