Pebbles, la perra más vieja del mundo, ha muerto con 22 años en el sureste de Estados Unidos, así lo anunció el libro Guinness de récords mundiales en su página de internet. Fue nombrada con la categoría del «perro más viejo del mundo» el pasado mes de mayo.
Pebbles nació en el estado de Nueva York, en Long Island, y vivió la mayoría de su vida en Carolina del Sur. Durante su vida, tuvo 32 cachorros. Desde el año 2.012 sus dueños la alimentaban con comida para gatos.
«Pebbles, el perro más viejo del mundo, lamentablemente falleció de manera natural y en paz en su casa y rodeada de su familia», escribieron sus dueños en Instagram. «Pasaba sus días disfrutando de la música Country y siendo muy querida. Le gustaba probar nuevos alimentos, la mimaba y, sobre todo, la amaba. No era un perro más, tenía su propia personalidad y todos los que la conocieron la adoraban. Fue un auténtico honor tenerla como mascota y compartir nuestra vida con ella», expresaron los dueños en el comunicado.
